sábado, 21 de septiembre de 2013

Una autovía hacia el amor

Envuelto en diseños y planos,
una idea llegó a mi cabeza,
siendo honesto sin embargo
no sabía si tendría destreza.

Para dibujar el amor,
colorear la pátina usada
en este lienzo esculpido,
triunfando en medio de la nada.

Pues un camino sembrado
un día quedó abierto,
donde los humildes pasos
dejarán huellas de alivio.

Al ver un horizonte hermoso,
junto a fondas como molinos,
al lado de una mujer que escojo,
junto a un abrazo muy sentido.

Las cunetas fueron rellenadas
con la misma pasta sincera,
que utilizó en pasadas primaveras
siendo su protagonista del alma.

Los indicadores siempre indicaron
cuál era el camino más corto,
a un dulce reguero de abrazos
siendo la paciencia su feliz aliado.

Los quitamiedos que fueron instalados
aliviaron penas y demás pesares,
siendo delicadas y sutiles manos
las que abrazaron este amor reinventado.

En la calzada, un manto de sueños
era compactado usando miles sonrisas,
que aportaran la estabilidad necesaria,
a unos novios, príncipes y dueños.

De esta autovía imaginaria,
que aporta rapidez y sosiego
a un conductor que canta arias
cuando busca de ella consuelo.

Gracias por permitir construirla,
a este ingeniero que abrió caminos,
hace de ello casi una década,
una década pintada de ensueño.

Quizás esta carretera nunca cierre
y nunca pierda la estable consistencia,
de este amor que a ella quiere,
dedicarle versos, una pizca de paciencia.

Para decirle, a pesar de los baches,
cuanto ama esta vía abierta,
entre corazones sin remaches,
entre amigos de confianza plena.

Sueña que una noche atraviesas,
esta vía de servicio limpia y honesta,
pues al otro lado de tu viaje,
estará siempre, siempre, este paje.

Que recibe a diario tormentas de amor,
de un amor que hoy celebra,
3285 días de constante y ardua tarea,
en mantener viva la llama de la pasión.

Con mi amor eterno, en nuestro IX aniversario
Juanjo.

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